Las nuevas tecnologías pueden tener un gran potencial educativo y empresarial, pero su uso inadecuado o abusivo puede acarrear consecuencias negativas.
Tanto que podría llegar afectar la salud, generando alteraciones físicas y psicológicas como trastornos emocionales, sociales e intelectuales o incluso podría afectar el buen funcionamiento del Internet y correos.
Un gran porcentaje en la vida cotidiana tanto laboral y personal, las herramientas tecnológicas más usadas, son: correo, Internet, software, y las redes sociales.
Sin embargo, cuando estos recursos no son administrados y controlados desde los puestos de trabajo y en los horarios laborales, las empresas están expuestas a riesgos informáticos que podrían presentarse situaciones como:
- Utilizar el Internet en horarios laborales para fines personales.
- Acceder a páginas web no permitidas, que además podrían contener programas espías, malware, entre otros, afectando la estabilidad y la seguridad de la red de la compañía, por un ataque cibernético.
- Instalación de software no autorizado, llevando a las empresas a pagar multas e indemnizaciones por violar las leyes de derechos de autor.
- Hacer uso del correo para cualquier propósito ajeno a las funciones propias de la empresa, mensajes masivos o cadenas, lo cual puede generar spam, descarga de contenido con virus.
- Acceso a la información confidencial a través de la red, como también entregar información a terceros sin autorización.
Tengamos en cuenta que, si no se toman medidas sobre el uso de estos recursos, esto puede afectar la seguridad, productividad, pérdidas económicas para las empresas, por una inadecuada y/o abusiva utilización de las herramientas tecnológicas.